Ohhh Oscuro "Voto Golondrino"
Tomado de El País.
Este martes la reelección del Alcalde de Puente Piedra ha originado fuertes protestas, pero en Puente Piedra no es el único caso. Hay más distritos en el interior del Pais, donde se han sucitado este tipo de enfrentamientos entre pobladores y las fuerzas del orden. Podemos lo sucedido en el Distrito de Matapalos (Tumbes), Huarmaca (Piura), Huayucachi (Junín), Bolognesi (Áncash), Salaverry (La Libertad), Chalamarca, San Juan y Miracosta (Cajamarca), José Leonardo Ortíz (Chiclayo).
Las protestas van desde impedimento por la instalación de las mesas electorales el mismo día domingo hasta la quema de autos y destrucción a pedrada limpia del local municipal. Peor, ¿Por qué tanta violencia? ¿Por qué la protesta?. Lo que se puede recoger en diferentes medios de comunicaron es la misma versión: “la población no acepta al candidato elegido por voto popular”. Se dice que este candidato ha ganado en un proceso electoral fraudulento. Pero entonces, ¿Cómo puede un candidato ganar en las urnas si no cuenta con el respaldo popular? La respuesta a esto vendría a ser lo que se ha denominado “el voto golondrino”. Es decir el voto que emiten algunas personas por el candidato de un distrito, aun no siendo estos electores verdaderos pobladores del distrito por el que votan. Realmente lo ideal seria que las personas voten y elijan al candidato de la región y el distrito en el que viven pero esto no se esta dando así. Pero resulta que esto ocurría antes y era casi poco percibida; Sin embargo podemos decir que estamos ante una nueva estrategia política: “Voto Golondrino Industrial”.
Según el JNE el Voto Golondrino estaría presente en 72 distritos, 39 provincias y 16 departamentos. El votante golondrino decide cambiar el lugar de su domicilio, motivado por alguna ventaja de tipo económico generalmente, convirtiéndose así en un “distorsionador” de la democracia. Como consecuencia el resultado del acto electoral no refleja así la voluntad del pueblo. El voto golondrino no permite que se respete la voluntad del pueblo.
En mi caso por ejemplo, yo no voté ni por Alan ni por Humala, y eso no significa que salga a despotricar y a generar violencia por las calles. Queramos o no debemos aceptar la voluntad popular, sin embargo si se evidencia que se ha cometido un fraude, entonces se debe seguir un proceso de nulidad pero este debe realizarse por las vías democráticas. Los desmanes que pude ver por televisión sólo reflejaban el caos absoluto y un total desprecio a la propiedad pública que en buena cuenta viene a ser propiedad de todos los vecinos de un distrito.
La tarea de encontrar una solución para frenar el “Voto Golondrino” no es nada fácil para el JNE.
Realmente cuando Bécquer escribió "Volverán las Oscuras golondrinas en tu balcón sus nidos a colgar" nadie hacia presagiar que el termino “golondrino” se pondría de moda en el Perú después de casi 150 años de ser publicado. Y si que se ha puesto de moda, pero realmente que moda. El famoso “Voto Golondrino” ha sido tomado como el caballito de batalla en los últimos 3 días en muchos distritos y regiones del Perú.
Este martes la reelección del Alcalde de Puente Piedra ha originado fuertes protestas, pero en Puente Piedra no es el único caso. Hay más distritos en el interior del Pais, donde se han sucitado este tipo de enfrentamientos entre pobladores y las fuerzas del orden. Podemos lo sucedido en el Distrito de Matapalos (Tumbes), Huarmaca (Piura), Huayucachi (Junín), Bolognesi (Áncash), Salaverry (La Libertad), Chalamarca, San Juan y Miracosta (Cajamarca), José Leonardo Ortíz (Chiclayo).
Las protestas van desde impedimento por la instalación de las mesas electorales el mismo día domingo hasta la quema de autos y destrucción a pedrada limpia del local municipal. Peor, ¿Por qué tanta violencia? ¿Por qué la protesta?. Lo que se puede recoger en diferentes medios de comunicaron es la misma versión: “la población no acepta al candidato elegido por voto popular”. Se dice que este candidato ha ganado en un proceso electoral fraudulento. Pero entonces, ¿Cómo puede un candidato ganar en las urnas si no cuenta con el respaldo popular? La respuesta a esto vendría a ser lo que se ha denominado “el voto golondrino”. Es decir el voto que emiten algunas personas por el candidato de un distrito, aun no siendo estos electores verdaderos pobladores del distrito por el que votan. Realmente lo ideal seria que las personas voten y elijan al candidato de la región y el distrito en el que viven pero esto no se esta dando así. Pero resulta que esto ocurría antes y era casi poco percibida; Sin embargo podemos decir que estamos ante una nueva estrategia política: “Voto Golondrino Industrial”.
Según el JNE el Voto Golondrino estaría presente en 72 distritos, 39 provincias y 16 departamentos. El votante golondrino decide cambiar el lugar de su domicilio, motivado por alguna ventaja de tipo económico generalmente, convirtiéndose así en un “distorsionador” de la democracia. Como consecuencia el resultado del acto electoral no refleja así la voluntad del pueblo. El voto golondrino no permite que se respete la voluntad del pueblo.
En mi caso por ejemplo, yo no voté ni por Alan ni por Humala, y eso no significa que salga a despotricar y a generar violencia por las calles. Queramos o no debemos aceptar la voluntad popular, sin embargo si se evidencia que se ha cometido un fraude, entonces se debe seguir un proceso de nulidad pero este debe realizarse por las vías democráticas. Los desmanes que pude ver por televisión sólo reflejaban el caos absoluto y un total desprecio a la propiedad pública que en buena cuenta viene a ser propiedad de todos los vecinos de un distrito.
La tarea de encontrar una solución para frenar el “Voto Golondrino” no es nada fácil para el JNE.